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Descubrimiento:
En 1817, por F. Strohmeyer
Número Atómico: 48
Estructura electrónica: [Kr] 4d10 5s2
Números de oxidación: +1 (raro), +2
Usos: Se
usa en aleaciones de cojinetes con bajo coeficiente de fricción
y gran resistencia a la fatiga. Se usa mucho (60%) en electrodeposición:
recubrimientos de acumuladores y rectificadores. También en muchos
tipos de soldadura, baterías níquel-cadmio recargables,
barras de control del flujo de neutrones en los reactores nucleares.
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Descubierto
por Strohmeyer en 1817 de una impureza en la calamina (carbonato de cinc),
de donde procede el nombre. No se encuentra nativo. Frecuentemente se
presenta en pequeñas cantidades asociado a minerales de cinc, tales
como la esfalerita (ZnS). Minerales propios son la greenockita o blenda
de cadmio (CdS) (que es el único importante), la otavita (CdCO3),
la monteponita (CdO). Representa el 0,000015% en peso de la corteza terrestre.
Es un metal blanco plateado, brillante, dúctil y blando que puede
cortarse fácilmente con un cuchillo. Cruje al doblarlo. Se parece
bastante al cinc en sus propiedades físicas y químicas.
Es estable al aire; pierde el brillo al cabo de bastante tiempo.
Tanto el cadmio como sus compuestos son muy tóxicos. Los fallos
en la apreciación de su toxicidad pueden producir que los trabajadores
estén expuestos sin saberlo a vapores peligrosos. La soldadura
de plata, por ejemplo, que contiene cadmio, debería manejarse con
cuidado. La inhalación de pequeñas cantidades produce fiebre
continua y edema pulmonar en grandes concentraciones.
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