|
Descubrimiento:
Antigüedad (se menciona en el Éxodo)
Número Atómico: 82
Estructura electrónica: [Xe] 4f14 5d10
6s2 6p2
Números de oxidación: +2, +4
Usos: Protección frente a radiaciones, baterías (se
emplea el metal y su óxido), municiones. Recubrimiento de cables,
fontanería y fabricación de plomo tetraetilo (aditivo antidetonante
de la gasolinas con plomo). Sus aleaciones se emplean en soldadura, caracteres
de imprenta y varios metales antifricción.
|
Mencionado
en el Éxodo; los romanos lo utilizaban en grandes cantidades para
la conducción de agua. Los alquimistas creían que el plomo
era el metal más antiguo y lo asociaban con el planeta Saturno.
Representa el 0,0014% en peso de la corteza. Se encuentra nativo en algunos
minerales férricos de Suecia y en yacimientos auríferos.
Entre sus minerales destaca la galena (PbS), que forma cristales cúbicos
de gran tamaño y constituye su fuente principal.
Es un metal blanco azulado, brillante, muy blando, muy maleable y dúctil.
Al aire forma rápidamente una capa protectora de color gris de
carbonato básico que impide la corrosión posterior (las
tuberías de plomo usadas por los romanos para sus baños
todavía están en uso).
Venenoso para el hombre (como la mayoría de los metales pesados):
la ingestión crónica de pequeñas cantidades de plomo
(en forma de vapor, humo o polvo) provoca saturnismo. Otros compuestos
de plomo muy tóxicos son el carbonato (blanco) y sus sublimados
y el cromato de plomo (amarillo), minio (entre otros) que se utilizan
en pinturas. Su uso está muy reducido por su peligrosidad.
|