Todo texto debe respetar unas reglas, unas normas previamente establecidas, y acomodarse a aquello que quiere comunicar.
En primer lugar, hemos de señalar que el texto se emite porque hay una intención comunicativa por parte del
emisor. Dependiendo de esa intención, el hablante selecciona un tema, crea un mensaje, para que el receptor lo capte y lo entienda. Al referirnos a la adecuación pragmática estamos hablando de la intención del emisor y de su propósito en el receptor. Así pues:
El emisor selecciona el lenguaje más "adecuado" y es aquí donde se da la selección del registro.
Nuestra actividad se realiza en distintos círculos que conforman los "espacios comunicativos" (la familia, el trabajo, los amigos, ...) Esos círculos o áreas en las que se desarrollan los actos de habla, se denominan ámbitos de uso. En función de dichos ámbitos, se seleccionan los registros.
¿Qué factores influyen en la elección de un registro?
La relación entre emisor y receptor.
Momento y lugar en el que se produce el acto comunicativo.