Actividad 4

1. Comentario crítico del texto.

El texto pertenece al autor Ortega y Gasset, máximo representante del ensayo novecentista. Corresponde a un fragmento de su obra El tema de nuestro tiempo.

El eje temático sobre el que se sustenta es la dualidad entre la razón pura y la vida espontánea. Se sirve del pensamiento socrático como punto de partida y comienza su argumentación. Según el autor, Sócrates estaba en un error: debemos someter la razón a la vitalidad, supeditarla a lo espontáneo y no a la inversa como proponía el filósofo griego.

El título es claramente explicativo ya que nos anticipa el contenido que va a desarrollarse a continuación. La estructura se articula en tres párrafos:

El autor reitera la opinión que había expuesto al principio y la desarrolla, señalando que la razón pura no puede suplantar la vida espontánea, no son dos vidas independientes. La vida del intelecto forma parte de nuestra vida, y por ello el individuo tiene que "nutrirse de ella, pero sin perder su vitalidad y espontaneidad". La razón pura debe ceder terreno a la razón vital.

La estructura interna responde a un esquema de argumentación ya que el autor desde el comienzo adopta una postura y la defiende valiéndose de distintos argumentos:

El proceso hacia la tesis se basa en una exposición contrastada de dos comportamientos culturales: el clásico (Sócrates) y el contemporáneo (el del autor). El procedimiento es más literario que científico. Se trata de un ensayo, por tanto es un texto humanístico, pertenece al discurso orientador y persigue la persuasión y la reflexión. Para conseguir su propósito utiliza un registro culto, muy formal. Ortega se dirige a un lector selecto, por encima del nivel medio. El tema tratado obliga a una riqueza léxica y a amplios periodos oracionales que le permitan desarrollar su razonamiento. Ya hemos señalado que se combina el estilo propio del lenguaje científico y el del literario. Del primero conserva la abundancia de nombres abstractos, tecnicismos, ...; del literario la capacidad de sugestión utilizando figuras literarias, adjetivos ornamentales...

Las funciones lingüísticas que se aprecian en el texto son: la  referencial (alusiones a Sócrates, uso de la tercera persona,…) y la expresiva, ya que el autor a través del plural nos hace partícipes de sus propias reflexiones. Incluso podemos hablar de ciertos atisbos de función poética, por el tratamiento y empleo de ciertos recursos. La presencia de contenidos ideológicos propicia la entrada de elementos subjetivos y ese apasionamiento, esa preocupación del autor convierte la función referencial en función emotiva ( a través de juicios de valor y estimaciones sobre el pensamiento socrático) e incluso apelativa cuando nos hace copartícipes de sus preocupaciones existenciales.

La pérdida de elementos objetivadores y la facilidad elocutiva nos hace ver un texto muy modalizado, donde el  autor valora y expone su opinión. El mismo Ortega y Gasset decía que el ensayista contempla la vida y la cultura “desde su corazón”. De ahí que los elementos deícticos muestren la presencia de yo, un plural de modestia que le sirve para distanciarse y no darse a conocer abiertamente. Veamos algunos ejemplos:

Posesivos y pronombres

Nuestra existencia, nuestra visión ,nos proporciona ,nuestra generación, nuestro tiempo

Formas verbales

Seguimos viendo ,tendemos, somos, suplantamos, pensamos, decimos, fingimos … ,vemos

Al mismo tiempo aparecen referencias deícticas espacio-temporales que le sirven para mostrar como la concepción clásica de la razón debe ceder paso a una nueva ideología en la que la razón y la cultura sirvan a la vida del futuro.

Pasado

Presente de la enunciación

Futuro

Tiempo de Sócrates
Consistía ,podía, acababan, conocía, hacía, desconfiaba, desconfía, fue

Hoy, puede, queda, tendemos, es, proporciona, vive ...   

Dentro de pocos años, parecerá

Destacamos la reiteración del sintagma “El tema del tiempo de Sócrates” y “El tema de nuestro tiempo” empleada por el autor para oponer el pasado al presente, e incluso al futuro venidero que cierra el texto. Desde el comienzo nos muestra  su obsesión: la pugna entre razón/vitalidad y para ello se sirve de distintos mecanismos modalizadores que ahora comentaremos: 

  Sustantivos 

Adjetivos  

Adverbios

Razón, racionalismo, intelecto, cultura, arte, ... / Existencia, vida, espontaneidad, fe, vitalidad, ...

Pura, fanática, racionalista, segunda, ... / primaria, reflexivo, espontánea, ...

Espontáneamente, claramente, precisamente, ...

La red léxico-semántica se organiza sutentándose en una dualidad de contrastes que manifiesta en todo el texto y actúa como ejemplo de elemento cohesionador:

Razón > pura - reflexiva / Razón > vital - espontánea

El autor se vale del recurso de derivación para crear diversas fórmulas léxicas que le sirven para mostrar su opinión y reflexionar sobre el tema. Por ejemplo:

Añadamos el recurso de reiteración (cuasi-copias) en términos como razón, racional, espontáneo, ... que se repiten una y otra vez. La cohesión se verifica también con el uso casi exclusivo, del presente gnómico o atemporal, propio de los textos ensayísticos. La presencia de ciertos mecanismos de referencia se observa en ejemplos de deixis anafórica: "la espontaneidad no puede ser anulada: sólo cabe detenerla, frenarla, cubrirla .

Por último, para concluir este apartado podemos aludir a la cohesión gramatical que se logra a través de ciertos marcadores textuales:

Tras el comentario nos reafirmamos en lo enunciado al comienzo del mismo: se trata de un texto argumentativo, de género ensayístico y pertenece a la tipología de textos humanísticos. A través de la argumentación contrastada de dos pensamientos: el socrático y el contemporáneo al autor, juzga el tema de la razón, preocupación obsesiva en la obra de Ortega y Gasset. Pensamiento y emoción se entremezclan, descansando sobre el peso de la reflexión.

2. Cuestiones.

a) ¿A qué clase de palabra pertenece "lo"?, ¿Cuál es su función sintáctica y qué valor deíctico posee?.

Lo, es un pronombre personal. La función que desempeña es objeto directo y posee un valor anafórico refiriéndose al sintagma "lo espontáneo" que ha aparecido anteriormente.


b) Utiliza el texto y explica mediante ejemplos qué se entiende por campo derivativo.

El campor derivativo, conocido tradicionalmente como familia léxica, se define como un conjunto de palabras que poseen una misma base lexemática. A lo largo del texto el autor utiliza el recurso de campo derivativo para lograr cohesionar su enunciado. Ejemplos:

c) ¿A qué se refiere el autor cuando dice: "A pesar de Copérnico, seguimos viendo el sol ponerse por occidente"?

Según Copérnico (1473 - 1543), "en medio de todas las cosas se sitúa el sol". Su cosmología (heliocentrismo) emplazaba un sol estático y desmontaba las viejas teorías de Tolomeo, quien decía que la Tierra era el centro y que todo, incluido el sol, giraba a su alrededor.

Sin embargo continuamos diciendo que es el sol quien se pone por occidente, cuando en realidad es la Tierra quien gira y no el gran astro.


d) Analiza la estructura interna de las siguientes palabras: vitalidad, ilimitadas, miraba.

vitalidad: se trata de un sustantivo. Posee una base lexemática y los morfemas flexivos de género femenino y número singular. Los morfemas derivativos sufijos: -al / -idad. Su estructura es la de una palabra derivada.

ilimitadas: se trata de un adjetivo. Posee una base lexemática (limit-) y los morfemas flexivos de género femenino (-a), número plural (-s) y grado positivo. El morfema derivativo es el prefijo i- (indica negación). La forma -ad indica que se trata de un participio adjetivo, según Bello.

miraba: se trata de un verbo. Posee una base lexemática (mir-) y una desinencia verbal (-aba) que nos indica los morfemas flexivos de número singular, tercera persona, tiempo imperfecto, modo indicativo, aspecto durativo y voz activa.