Lorca y el teatro

Federico García Lorca expresa, a través de sus obras teatrales, los problemas de la vida y del momento que vivió medianteun lenguaje cargado de matices y significado.
En su conferencia "Charla sobre teatro" destaca que para él:
El teatro es uno de los más expresivos y útiles instrumentos para la edificación de un país y el barómetro que marca su grandeza o su descenso. Un teatro sensible y bien orientado en todas sus ramas, desde la tragedia al vodevil, puede cambiar en pocos años la sensibilidad del pueblo; y un teatro destrozado, donde las pezuñas sustituyen a las alas, pueden achabacanar y adormecer a una nación entera.
El teatro es una escuela de llanto y de risa y una tribuna libre donde los hombres pueden poner en evidencia morales viejas o equívocas y explicar con ejemplos vivos normas eternas del corazón y del sentimiento del hombre.
Federico García Lorca, "Charla sobre teatro", en Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes
Un año después, dice en una entrevista sobre el teatro, publicada en el diario La Voz, en Madrid, el 7 de abril de 1936:
El teatro fue siempre mi vocación. He dado al teatro muchas horas de mi vida. Tengo un concepto del teatro en cierta forma personal y resistente. El teatro es la poesía que se levanta del libro y se hace humana. Y al hacerse, habla y grita, llora y se desespera. El teatro necesita que los personajes que aparezcan en la escena lleven un traje de poesía y al mismo tiempo que se les vean los huesos, la sangre. Han de ser tan humanos, tan horrorosamente trágicos y ligados a la vida y al día con una fuerza tal, que muestren sus traiciones, que se aprecien sus olores y que salga a los labios toda la valentía de sus palabras llenas de amor o de ascos.
Podemos distinguir, fundamentalmente, tres etapas en su producción teatral:
Etapa inicial
Es una etapa de inicios y experimentación. Destacan El maleficio de la mariposa, en el que aparece el tema fundamental para el autor del amor imposible; Mariana Pineda, drama histórico con tintes modernistas; y La zapatera prodigiosa (farsa para personas).
Teatro vanguardista o "imposible"
Coincide con su interés por la vanguardia surrealista, en los años 30. Destacan El público y Así que pasen cinco años.
La época de la fama
Lorca consigue el reconocimiento de la crítica y del público en España y América. La tragedia lo ayuda a representar los conflictos de la realidad contemporánea en torno al amor, las pasiones, los instintos, la tradición. Destacan Bodas de Sangre, Yerma, Doña Rosita la Soltera o el lenguaje de las flores y La casa de Bernarda Alba.
El tema común a la mayoría de obras dramáticas de Federico García Lorca es la denuncia de la opresión de las mujeres. Ellas se enfrentan a una sociedad autoritaria, que no les permite vivir en libertad, sino bajo las rígidas reglas de la tradición. Además son retratadas como personajes desfavorecidos; por ello, Lorca la sitúa en un papel central. En cada obra teatral, intenta denunciar un aspecto de la sociedad al que se tienen que enfrentar las mujeres en su época: adulterio, difamación, crítica, esterilidad, soledad, opresión...
Federico estuvo unido al teatro a lo largo de toda su trayectoria, pero es en los últimos años cuando se erige como dramaturgo universal, gracias al éxito de sus últimas obras y a la creación, desde 1932 de la compañía de teatro universitario "La Barraca", con la que recorrió muchos pueblos de España acercando obras clásicas a los habitantes de estas zonas rurales. Esta iniciativa estuvo apoyada por el gobierno republicano.