Las Islas Canarias son un espacio muy densamente poblado, pues en un lugar relativamente pequeño viven algo de dos millones de personas, Además, junto con la Región de Murcia, tienen la población más joven del conjunto estatal.
Su poblamiento actual deriva de la conquista por parte de la corona de Castilla durante el S. XV, y fue a partir de ese momento cuando empezaron a establecerse los principales asentamientos actuales. Tradicionalmente la pesca, los cultivos -tanto de subsistencia como comerciales de tipo tropical- y, en menor medida, la ganadería han sido el sustento de la población. A esto hemos de añadir la actividad portuaria y comercial, pues las islas están situadas en la ruta hacia América. Esto explica, en gran medida, la conexión histórica de las Canarias con Cuba, Venezuela y Puerto Rico.

A partir de los años sesenta del siglo XX, el panorama que se ha descrito cambió totalmente con la irrupción del turismo de masas. Gracias al abaratamiento de los viajes aéreos, personas del norte de Europa acuden a las islas Canarias atraídas por la suavidad y estabilidad de su clima, especialmente en invierno, que es la temporada alta. De hecho, en verano los principales flujos de turistas europeos que buscan "sol y playa" se dirigen al litoral mediterráneo. Este elevado número de visitantes comportará la construcción masiva de hoteles, apartamentos, infraestructuras y locales comerciales de todo tipo. De esta manera, actualmente el terciario, y el turismo especialmente, representan las tres cuartas partes de la economía insular. Junto al turismo se ha desarrollado la construcción, pero, por contra, han desaparecido en gran parte los sectores pesquero e industrial. Por todo ello, hablamos de dependencia total respecto de este sector.
Los principales problemas ecológicos son la ocupación del litoral con viviendas, los residuos que genera la población estable o turística y la escasez de agua dulce en algunas temporadas del año. Cabe recordar que en Canarias no hay ríos, por lo que se ven obligados a desalar el agua del mar. A pesar de ello, los diferentes gobiernos han declarado gran cantidad de espacios naturales protegidos, de manera que cuatro de los trece parques nacionales están en estas islas.