La comedia de magia
Este tipo de comedias, que surge de la producción teatral del siglo XVIII y que tuvieron un éxito sin precedentes en Francia, destaca por el entramado escénico donde se desarrolla la representación y no tanto por su calidad literaria. De hecho, su arte fue denostado por muchos dramaturgos ya que veían en su propuesta aspectos poco creíbles, inverosímiles, que rayaban el mal gusto.
Las comedias de magia están plagadas de duendes, enanos y gigantes que se transforman, mutan en otros seres, desaparecen o se atribuyen cualidades mágicas, como volar. Con su comportamiento encandilaban a un público con escaso interés en las obras trascendentales.

- La pata de la cabra (1829), de Juan de Grimaldi.
- El anillo del diablo (1871), de Enrique Zumel
- Los polvos de la madre Celestina (1840), de Juan Eugenio Hartzenbusch.