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Los medios de comunicación de masas

El poder de los medios

Esquema de los medios de comunicación
Clase de Lengua / Alberto Corpas Martos. Los medios de comunicación (CC BY-SA)

Como su propio nombre indica, los medios de comunicación de masas son las vías de difusión de la información para una multitud de personas de manera simultánea. Los más importantes pueden ser la televisión, la radio, más recientemente, Internet, o, en el tema que nos ocupa, la prensa escrita: periódicos, revistas, etc.

La principal característica es, por tanto, que los mensajes se transmiten a través de la palabra escrita -aunque pueda venir acompañada de imágenes-. De este modo, puede ser un medio más restringido para determinados sectores de la población, ya que convierte en un requisito indispensable saber leer.

Si hablamos de los medios tradicionales, debemos nombrar a:

  • La prensa: se basa en la palabra escrita.
  • La televisión: se basa en la palabra y en la imagen.
  • La radio: se basa en la palabra oral.

A pesar de sus especificidades, todos comparten algunos rasgos comunes:

  • Tipos por el tema:
    • Generalista: trata contenidos variados sin centrarse específicamente en ninguno.
    • Especializado: se centra en una temática específica: música, motor, información...
  • Titularidad:
    • Pública: son medios de comunicación que pertenecen a los estados y deben cumplir un servicio público de información básica para la ciudadanía.
    • Privada: pertenecen a empresas privadas que los explotan como negocio.
  • Tipos de programas:
    • Informativos
    • Entretenimiento
    • Ficción
    • Culturales
    • Deportivos

Hoy día ninguno de estos medios puede mantenerse al margen de Internet. La red, junto a las grandes corporaciones, ha provocado que todos los medios se relacionen de manera natural con la palabra escrita, hablada y con la imagen, de manera que las fronteras que dividen unos medios de otros han quedado difuminadas. La facilidad a la hora de publicar y difundir información con los medios tecnológicos actuales ha provocado que prácticamente cualquier persona pueda producir material audiovisual relacionado con un acontecimiento, pero eso no convierte a la persona en periodista ni a la vía en un medio de comunicación.