Los subgéneros teatrales populares: pasos, entremeses y sainetes
Sainetes
Chulapos y flamencas
Así como el entremés deriva del paso, el sainete toma el testigo del entremés. Desde el siglo XVIII hasta el siglo XX, se utiliza la palabra sainete para referirse a una obra breve y cómica de un solo acto que se representaba en el intermedio o al final de una función teatral. Con el paso del tiempo fue extendiendo su duración y se representaba de forma independiente. Frecuentemente, se acompañaban de música y bailes.
Los personajes, como hemos visto en los pasos y en los entremeses, son personajes tipo que relatan tramas de la vida cotidiana en tono humorístico y burlesco.
Los sainetes se caracterizan por su aspecto costumbrista, es decir, por retratar las costumbres de un lugar. Ramón de la Cruz, autor del siglo XVIII, escribió muchos sainetes humorísticos en los que refleja la vida madrileña de su época. En otras ocasiones, sus obras vienen a ser parodias de las tragedias que se estaban representando en el momento.
Ya en el siglo XX, los autores más representativos son Carlos Arniches y los hermanos Álvarez Quintero. Tanto uno como los otros, además de ser autores prolíficos de sainetes y comedias, usaban la imitación de las hablas de España en sus textos para hacerlos más verosímiles y servir de muestra de la sociedad de la época. Carlos Arniches, aunque era alicantino, vivió mucho tiempo en Madrid y, por ello, refleja el lenguaje popular y castizo de allí. La comicidad en sus sainetes viene dada por el uso cómico del lenguaje.
Por su parte, Serafín y Joaquín son los hermanos Álvarez Quintero y, como sevillanos que eran, retrataron costumbres y tradiciones andaluzas. En sus textos, los rasgos dialectales del andaluz aparecen constantemente. Sus sainetes se caracterizan por relatar un costumbrismo amable que arranca sonrisas y cuyas tramas terminan de forma feliz. Aunque no dejan de ser cómicos, no abusan de los elementos humorísticos y apuestan más por el ingenio.
Ganas de reñir
Como ya sabemos, Serafín y Joaquín Álvarez Quintero escribían sainetes conjuntamente. A continuación vamos a leer uno de los más conocidos: "Ganas de reñir". Como su nombre indica, trata sobre una pareja en la que la chica tiene ganas de reñir y le sirve cualquier excusa para pelearse con su novio que ha venido a verla. Podemos imaginar que uno de los dos hermanos ha escrito el texto de Martirio, la chica, y el otro hermano ha escrito los parlamentos de Julián, el chico. Pero, por cosas de la vida, las intervenciones están desordenadas así que, en parejas, tendremos que ordenar el texto para hacer que Martirio y Julián dialoguen. Tened en cuenta que hay palabras que están escritas como suenan en las hablas andaluzas.
Así comienza el sainete:
Isabel Cortijo Delgado. Ganas de reñir(CC BY-NC-SA)
Estas son las intervenciones de Martirio y Julián que debéis combinar para que el sainete tenga sentido:
Isabel Cortijo Delgado. Martirio en "Ganas de reñir"(CC BY-NC-SA)Isabel Cortijo Delgado. Julián en "Ganas de reñir"(CC BY-NC-SA)
Cuando lo tengáis ordenado, ensayad el texto para hacer una lectura dramatizada incorporando los gestos que pensáis que pueden hacer los personajes para que sea más gracioso.
¿Quieres comprobar si lo habéis ordenado bien? Mira este vídeo con el sainete puesto en escena por un grupo de teatro aficionado.
Estas son las intervenciones de Martirio que tienes que combinar con las de Julián:
¿Estás tú contento?
¡Si no te pido esplicasiones, Julián! Ayá tú.
Como venías sirbando!...
¿Pa mañana? No pienses pa tan lejos.
Estándolo tú...
Con la que tengo, hijo.
¿A mí? ¿Por qué?
¡Hola! ¿No traes er perro?
Lo cuá significa que tos los días pués vení antes, y no vienes... porque no se te antoja.
Ya lo he dicho.
Yo no me voy a meté en averiguarlo, ¿sabes?
Estas son las intervenciones de Julián:
No. Lo he dejao en casa.
Er resurtao es que te incomodas porque vengo a verte media hora antes. Lo tendré presente pa mañana.
¡Ah! Contento que está uno.
¿Eh?
Me lo dices con una cara...
¡Hola, perdisión!
¿Te pasa argo?
Según se da er trabajo en la fotografía...
¡Qué sé yo! Te veo de una forma... ¿Me he retardao, quisás? (Mira su reloj.) Ar contrario: no son las seis, y todos los días vengo a las seis y media...
Unas veses acude mucho público y otras veses poco...
¿No me ves? ¿Y tú, no estás contenta?
Este es el texto completo y ordenado:
Ganas de reñir
Sainete de los hermanos Álvarez Quintero
(Un rincón de una calle de Sevilla. Martirio, bellísima mujer, sale a la puerta de su casa a esperar sentada a su novio, que es fotógrafo.)
MARTIRIO: ¡Jesús con mi madre! ¡Las cosas de las viejas, señó! Si una no riñera con su novio na más que cuando tiene motivos, ¡vaya una grasia! La cuestión es reñí sin motivo. Se tienen ganas de reñí como se tienen ganas de comerse un durse o de tomá un pescao. Y hoy tengo yo ganas de reñí. Y riño. ¡Ya lo creo que riño! Esta tarde riño con é. No es que terminemos, no; es que riño esta tarde. Se me ha puesto en la cabesa reñí. Ayí viene. Míalo...
JULIÁN: ¡Hola, perdisión!
MARTIRIO: ¡Hola! ¿No traes er perro?
JULIÁN: No. Lo he dejao en casa.
MARTIRIO: Como venías sirbando!...
JULIÁN: ¡Ah! Contento que está uno.
MARTIRIO: ¿Estás tú contento?
JULIÁN: ¿No me ves? ¿Y tú, no estás contenta?
MARTIRIO: Estándolo tú...
JULIÁN: Me lo dices con una cara...
MARTIRIO: Con la que tengo, hijo.
JULIÁN: ¿Te pasa argo?
MARTIRIO: ¿A mí? ¿Por qué?
JULIÁN: ¡Qué sé yo! Te veo de una forma... ¿Me he retardao, quisás? (Mira su reloj.) Ar contrario: no son las seis, y todos los días vengo a las seis y media...
MARTIRIO: Lo cuá significa que tos los días pués vení antes, y no vienes... porque no se te antoja.
JULIÁN: Según se da er trabajo en la fotografía...
MARTIRIO: Yo no me voy a meté en averiguarlo, ¿sabes?
JULIÁN: Unas veses acude mucho público y otras veses poco...
MARTIRIO: ¡Si no te pido esplicasiones, Julián! Ayá tú.
JULIÁN: Er resurtao es que te incomodas porque vengo a verte media hora antes. Lo tendré presente pa mañana.
MARTIRIO: ¿Pa mañana? No pienses pa tan lejos.
JULIÁN: ¿Eh?
MARTIRIO: Ya lo he dicho.
Serafín y Joaquín Álvarez Quintero. "Ganas de reñir". De pasos y entremeses. Editorial: Algar.
Del humor local al humor universal
¿El humor es universal o lo que nos hace gracia tiene que ver con nuestra cultura y el lugar de dónde somos? En este ejercicio trataremos de dar respuesta a esta pregunta a través de cómicos que tengan rasgos dialectales del lugar de donde son y usen esos rasgos para provocar la risa como hacían los autores de los sainetes. Por ejemplo, el albaceteño Ernesto Sevilla se hizo famoso con un papel en el que caricaturizaba el habla manchega y también es muy conocido por su papel en la serie "La que se avecina". ¿Qué otros ejemplos de cómicos usan su acento como herramienta para hacer reír?