Los textos periodísticos son aquellos procedentes de los denominados medios de comunicación de masas (o medios sociales) cuya finalidad es informar sobre hechos y temas de interés en general. Aunque, como hemos dicho, su función principal es informar, también ofrecen, en función de su tipología, valoraciones críticas y opiniones sobre acontecimientos, noticias, etc.

Por tanto, los textos periodísticos de opinión se caracterizan por:

• Son textos en las que se aporta el punto de vista de quién los escribe utilizando argumentos y juicios de valor sobre temas actuales. 
• El tono y el estilo son libres.
• Combinan exposición y argumentación. Tienen una intención persuasiva.
• Los textos periodísticos de opinión, aunque presentan una disposición estructural libre, suelen organizarse en párrafos de extensión variable, pero suelen dividirse en tres partes.

Estructura más común de los textos periodísticos de opinión:

• lntroducción (presentación o planteamiento del tema).
• Desarrollo (presentación de los argumentos, juicios de valor, opiniones...).
• Conclusión (cierre del artículo de opinión).

Los textos de opinión destacan por presentar unos rasgos concretos que los diferencias de otros textos periodísticos más objetivos. La subjetividad está muy presente y lo vemos en los siguientes rasgos: 

• Uso de la 1º persona: “Asistimos fatigosamente a la consagración de la mentira como maniobra política.”; “Leía el otro día un reportaje de mi compañera Pino Alberola en el que se recogían las conclusiones de una encuesta realizada a adolescentes sobre la influencia que sobre ellos pueden causar los roles machistas de las series de televisión ”; “Antes de envenenarme, apago la radio.” (Arturo Pérez Reverte: "Ofendidos del mudo, uníos". XLS Semanal).
• Uso de verbos de opinión: “di que eso es…”, “asegurando que ...".
  
• Predominio de las funciones apelativa y expresiva. La expresiva está presente en el uso de la primera persona con el que la autora quiera mostrar su punto de vista. En cuanto a la función apelativa, podemos reconocerla en la presencia de la segunda persona y en las constantes interpelaciones con las que se pretende llamar la atención del receptor para que reaccione ante la situación de abuso y control que puede padecer: “Y por favor, dale puerta ya a ese imbécil que te controla los mensajes del móvil, te grita si te ve con otro chico y te  obliga a abrocharte un botón más de la camisa. Con el tiempo, si no lo frenas, se creerá tu dueño y esas 'muestras de amor' que ahora hasta te halagan, te pueden acabar llevando a las portadas de los periódicos .” (Isabel Vicente: "Defectillos". Levante EMV).
• Presencia de oraciones exclamativas, imperativas e interrogativas: “¿Qué científicos asesoran ? Convendría que comparecieran.”; "Esa es la cuestión y no otra. ¿A qué hay que dar prioridad?"; “Pero ¿cuál es la edad media de los fallecidos?” (Javier Sampedro: "El triunfo de la estupidez". El País).
• Empleo de adjetivos valorativos y recursos estilísticos variados como la metáfora, la comparación etc. “APR: Tengo casi treinta mil libros en casa; suficientes para resistir hasta la última bala. Quien crea que esa trinchera extraordinaria, su confortable compañía, la felicidad inmensa de acariciar lomos de piel o cartoné y hojear páginas de papel, pueden sustituirse por un chisme de plástico con un millón de libros electrónicos dentro, no tiene ni puta idea. Ni de qué es un lector, ni de qué es un libro.” (Arturo Pérez Reverte: "Leer con luz de luna". XL Semanal).
• En cuanto a la lengua, preferentemente, destaca la utilización del registro estándar para llegar a un mayor número de lectores: “Mientras no controlemos la pandemia no habrá descanso para la economía, los puestos de trabajo se perderán a chorro y más años tardaremos en recuperarnos.” (Javier Sampedro: "El triunfo de la estupidez". El País).

Como rasgos propios, se pueden  señalar los siguientes: 

Rasgos morfosintácticos:

• Tendencia a alargar las oraciones mediante diferentes mecanismos: perífrasis, aposiciones, incisos, frases explicativas, locuciones adverbiales, preposicionales y conjuntivas. APR: “Mostrarse ofendido es garantía de integración social. ¿Quién va a resistirse, cuando hace tanto frío fuera? Todavía queda, naturalmente, quien se ofende y quien no; pero para eso están las líneas rojas y los que se atribuyen autoridad para establecerlas. En realidad siempre hubo dictadores –obispos, ayatolás, espadones–, pero antes lo eran tras imponerse con las armas, la religión o el dinero. Ahora lo hacen con los votos de una sociedad que los aplaude y apoya.” (Arturo Pérez Reverte: "Leer con luz de luna". XL Semanal).
• Abundancia de la voz pasiva. APR “Las universidades, antaño motor del pensamiento, se han convertido en sanedrines de corrección política donde se reemplaza la razón por la emoción y el debate por la ignorancia, con alumnos felices de cantar a coro y profesores acojonados o cómplices”; “Nunca se masacró a la disidencia con tanta saña ni con tantos medios”. (Arturo Pérez Reverte: "Leer con luz de luna". XL Semanal).
• Tendencia a colocar el sujeto al final:“Pues bien, resulta que a las jóvenes les gustan los malos de las pelis, los turbios algo canallas, los atormentados a los que finalmente salva el amor, lo que, llevado a la vida real, se traduce en que te atraiga más el repetidor desgreñado y espatarrado de la última fila que el buen chico y amigo eterno que se sienta a tu lado.” (Isabel Vicente: "Defectillos". Levante EMV).
• Mezcla del estilo directo e indirecto: “He dicho que libro de papel y libro electrónico deberían ser complementarios; pero si me obligan a elegir, diré alto y claro que no hay color.”; “Incluso los hay con ruido de pasar páginas cuando se va de una a otra, «lo que no deja de ser una simpática gilipollez". (Arturo Pérez Reverte: "Leer con luz de luna". XL Semanal).
  
• Empleo de barbarismos, sobre todo, anglicismos y galicismos: A + infinitivo en función de adyacente de un sustantivo: "tareas a cumplir".
• Perífrasis estar + siendo + participio: "están siendo investigadas las causas".
• Supresión de preposiciones: "Administración Sánchez".
• Condicional con valor de posibilidad: "Los empresarios habrían mostrado su interés en la propuesta".

Rasgos léxico-semánticos.

• Formas impropias en el uso del léxico: "visionar" por "ver", "agrede" por "ataca", "priorizar" por "dar prioridad".
• Uso inadecuado y excesivo de neologismos, extranjerismos y barbarismos: "light", "leasing", "holding", "apartheid", "el tema a tratar", "personación" por "acto de presencia"...
• Eufemismos: "agentes sociales" por "sindicatos", "representantes del pueblo" por "políticos", "conflicto laboral" por "huelga", "cese temporal de la convivencia" por "separación"...
• Generalizaciones: "de fuentes bien informadas", "toda la prensa recoge la información".
• Creación de términos nuevos mediante la afijación y composición: "inculpación", "euroescéptico", "telebasura"...
• Uso excesivo de siglas y acrónimos -a veces sin explicar su contenido: "IVA", "PRISA", "AIRTEL", "FENOSA", "REPSOL"...

Uso de recursos estilísticos o figuras literarias:

• Metáforas: "La guerra de los cargos públicos",  "el tsunami de los precios".
• Metonimias: "Madrid prohíbe abrir los bares".
• Personificaciones: "El buen comportamiento de los precios".
• Hipérboles: "Toda España se volcó con la Selección", "El dios de la tierra batida".