Normalmente, las personas con parálisis cerebral han sido valoradas por los servicios sanitarios y sociales. Por ello es imprescindible que desde el ámbito educativo exista una coordinación adecuada entre todos los implicados en dar una respuesta integral al alumnado.
En aquellos casos en los que el alumnado tiene limitaciones motrices graves y existe ausencia de lenguaje oral, las evaluaciones psicopedagógicas deben utilizar técnicas e instrumentos adecuados para una valoración óptima y funcional del desarrollo y competencias del alumnado (pruebas estandarizadas adaptadas a sus limitaciones, observaciones directas, cuestionarios aplicables a las personas de su entorno inmediato, escalas de desarrollo, grabaciones, etc.).
La identificación de las necesidades educativas especiales permitirá concretar la respuesta más adecuada en el entorno más inclusivo posible. Trataremos de favorecer su autonomía personal, el uso de sistemas aumentativos o alternativos para la comunicación y la utilización de un conjunto de recursos técnicos para facilitar el conocimiento del entorno y la comunicación.