Al igual que dos piezas de puzzle forman una unidad cuando se unen, algo parecido ocurre entre los determinantes y los sustantivos. Recordemos que el sustantivo es aquella palabra que utilizamos para nombrar personas, animales, cosas, lugares, sentimientos o emociones. El determinante es aquella palabra que le acompaña -generalmente situado antes del sustantivo- y concreta su significado.
Debemos tener en cuenta que los determinantes -al igual que sustantivos, adjetivos, pronombres, y verbos- son palabras variables, es decir, tienen varias formas dependiendo del uso que les demos. Para encajar a la perfección, como en el ejemplo del puzzle, no es suficiente con situar al determinante delante del sustantivo. Es preciso que exista concordancia -coincidencia- entre el género y el número de ambos. Por ejemplo:
Playa es un sustantivo de género femenino y número singular, por lo que los determinantes que le acompañen también deben serlo, por ejemplo: la playa, aquella playa o una playa.
¿Qué significa que el determinante concreta el significado del sustantivo?
Como su propio nombre indica, su labor es determinarlo y aportar información adicional a su significado. Dependiendo de la información que aporta, podemos hablar de los diferentes tipos de determinantes:
- Artículos: presentan sustantivos conocidos por los interlocutores.
- Demostrativos: establecen una relación de distancia entre el interlocutor y la realidad que representa el sustantivo.
- Posesivos: expresan la pertenencia del sustantivo.
- Numerales: indican una cantidad u orden precisos.
- Indefinidos: indican una cantidad, identidad o existencia de un modo impreciso.
- Interrogativos: acompañan al sustantivo en oraciones interrogativas.
- Exclamativos: acompañan al sustantivo en oraciones exclamativas.
- Relativos: sirven de enlace entre diferentes parte de la oración.
A lo largo de este recurso, vamos a aprender las características que los unen y diferencian y, además, reflexionaremos sobre su uso.