El profesor de Psicología del Lenguaje de la Universidad de Navarra, Gerardo Aguado, explica en una entrevista que "Los niños con estas dificultades tienen una serie de consecuencias amplias y muy persistentes: cuando un niño no adquiere bien el lenguaje oral no adquiere bien el lenguaje escrito, accede mal y tarde a los contenidos culturales, en su interacción con los demás se ve también mermado..."
Por tanto, sin un diagnóstico adecuado, el tratamiento puede no obtener los resultados deseados. Esta afirmación queda demostrada en los testimonios recogidos en el reportaje publicado por el diario Hoy.
Este trabajo periodístico presenta el caso de unos padres, cuyo hijo no recibió en un principio el diagnóstico adecuado. Al inicio, sus síntomas parecían ser los de un niño autista, sin embargo sus problemas derivaban de un trastorno del lenguaje.
"Supimos que mi hijo no era autista con 5 años porque fuimos a Madrid"
"Cuenta su historia con un objetivo: que no se repita. Puede que alguien vea lo que ha vivido y sienta que su hijo está en una situación similar. Según los expertos, un 6% de los niños sufren Trastorno Específico del Lenguaje. Algunos casos son leves, problemas para hablar, pero otros pueden confundirse con Trastornos Generalizados del Desarrollo como el autismo. El problema es que el TEL es poco conocido y por ello, Ceballos propone que se de a conocer en la región. «Podrían traer a los especialistas para que hablasen a los médicos sobre cómo diagnosticar esta enfermedad», explica. En Extremadura hay otros casos de niños con esta patología y necesitan medios, como unidades del lenguaje, para no tener que trasladarse a Madrid para el tratamiento de sus hijos."
(Supimos que mi hijo no era autista con 5 años porque fuimos a Madrid. Natalia Reigadas.
Diario "Hoy". Artículo publicado el 06 de febrero de 2011)