-Estoy de acuerdo en que, según digamos las cosas, podemos causar una reacción u otra en quien nos escucha.
-Claro, todo lo que decimos tiene sus matices. Ningún mensaje es neutro, Bea.
-Sí. Lo que pasa es que no todo el mundo sabe entender ese valor secundario. Manuel. A los chicos, por ejemplo, hay que decirles las cosas muy claritas para que te entiendan.
-Ya veo, pero creo yo que eso no va por géneros, sino por la capacidad "crítica" que cada uno tenga.
-Ah, pues si es por eso, las chicas se pasan todo el día "cortando trajes", como dice mi padre.
-Vamos a ver, Sergio, aquí, en clase de lengua utilizamos la palabra "crítica" con otro sentido. Venga, leed el texto que os propongo, a ver si centramos un poco el tema.