-¿Sabes una cosa, Manuel?
-Dime, Sergio.
-Lo más difícil del trabajo que hemos hecho estos días ha sido tener que explicarlo a los compañeros, salir ahí delante. Me puse nervioso.
-No me puedo creer que esto me lo digas tú, que tienes respuestas para todo.
-Ya, pero no es lo mismo cuando debatimos las normas de convivencia o cuando digo cualquier tontería que intentar que los demás comprendan una idea. Tanto mi compañero como yo teníamos que buscar las palabras exactas... Y además estaba el uso del proyector, el ritmo que tenía que seguir la diapositiva, la información que llevaba, "que no puede ser excesiva" como tú nos dijiste, "no podéis ir leyendo sin más la presentación, tenéis que utilizarla para fijar la idea en el auditorio"... Todo eso que nos ibas contando.
-La verdad, Sergio, que de nuevo me sorprendes. Buena reflexión. Y los demás ¿habéis tenido los mismos problemas que Sergio? ¿Os habéis puesto nerviosos?