Si le preguntas a tus padres por los gastos periódicos que hay en una casa, seguro que te hablan de la luz, el gas, el teléfono, etc. En la gran mayoría de ellos el coste que se paga regularmente suele depender de dos conceptos: un coste fijo por tener contratado el servicio y otra parte que depende del gasto que se haya realizado en ese tiempo. Por eso, si te dicen solo cuánto tienes que pagar; no sabes, de entrada, cuánto vale cada uno de los conceptos.
Como ya has aprendido en la unidad anterior, cuando relacionamos cantidades que conocemos con otras que nos resultan desconocidas enseguida nos encontramos con ecuaciones.
En este primer apartado vamos a estudiar las ecuaciones en las que se mezclan dos elementos que no conocemos, como ha ocurrido en los ejemplos que hemos visto hasta ahora.